Estamos pasando por uno de los periodos más críticos de contaminación ambiental en la historia de la Ciudad de México (y la situación parece ser la misma en muchas de las principales capitales del mundo), en este momento nos encontramos enfrentando una contingencia ambiental fase 1, que implica que toda actividad industrial debe reducirse al menos en un 30%, entre muchas otras cosas. Si a esta amenaza constante le sumamos el estrés que ocasiona el tráfico, el aumento en las tarifas de la gasolina, los accidentes cada día más frecuentes y la sedentarización que pone en riesgo nuestra salud, resulta que el uso indiscriminado del automóvil se convierte en una pésima idea.
Estas son cinco razones que te convencerán de dejar de ser un conductor de tiempo completo. No, no te estamos pidiendo que nunca más utilices tu auto, sino que lo hagas sabiamente, es decir, cuando verdaderamente lo necesites. Lo importante es darte cuenta de que no lo necesitas tanto como creías.
1. Reducirás enormemente tu huella ambiental
El CO2 es uno de los principales responsables del cambio climático, y los automóviles son sus principales emisores. Reducir tus horas de manejo pueden hacer una gran diferencia en el medio ambiente. ¿Crees que eres una sola persona y lo que hagas no cuenta? Nunca olvides el poder de que tus acciones inspiren a otros.
2. Dejarás de llegar tarde
Cuando dependemos del automóvil para transportarnos, estamos en manos de la contingencia. Un choque, un embotellamiento o cualquier otra eventualidad pueden retrasarnos sin que podamos hacer nada. Utilizar medios de transporte alternativos, como la bicicleta, te librará de todos esos problemas.
3. No arriesgarás tu vida
Los accidentes de automóvil son una de las primeras causas de muerte a nivel internacional. Se calcula que cerca de 1.24 millones de personas en el mundo mueren al año debido a un accidente automovilístico, esto es, cerca 3 mil 400 personas por día.
4. Ahorrarás
Según el Banco Mundial, las personas gastan cerca de 80 mil pesos al año en el mantenimiento de sus automóviles, algunas incluso mucho más. Si sumamos servicios, refacciones, verificaciones, multas, gasolina, tenencias, etc., podemos darnos una idea hacia dónde se está yendo nuestro dinero.
5. Mejorará tu salud
El automóvil promueve el sedentarismo pues las personas pasan mucho tiempo, a veces horas, sentadas en el tráfico con las piernas inmóviles, lo que aumenta el riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares y metabólicas. Caminar, usar bicicleta o transporte público te obliga a moverte y a ejercitarte. Y tu salud lo agradecerá.
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