Los niños se vuelven usuarios activos de internet y de las distintas redes sociales a edades cada vez más tempranas. Ante esto, en lugar de prohibirles el acceso (porque igual van a hacerlo, pero a escondidas, con un mayor peligro), lo ideal es que los padres naveguen junto con ellos y los guíen para que su experiencia sea segura y enriquecedora.
Con el fin de ayudar a los padres de familia en esta labor, Instagram, de la mano de Red por los Derechos de la Infancia en México (REDIM) y Tejiendo Redes Infancia en América Latina y el Caribe, crearon la Guía para Padres, con el firme propósito de ofrecer herramientas de seguridad que permitan a los padres ayudar a sus hijos a tener una experiencia positiva en la plataforma.
En esta guía, los padres encontrarán consejos para administrar la privacidad y la forma en la que interactúan con otros usuarios, así como también controlar los tiempos que sus hijos utilizan Instagram. Los padres podrán contar con estos recursos y ayudar a sus hijos a administrar sus cuentas de manera segura y evitar o detectar posibles casos de hackeos o phishing, así como prevenir el bullying y el acoso virtual. Puedes consultar y descargar la guía completa en este enlace.
Es importante que los padres hablen con sus hijos sobre la importancia de no brindar información privada a personas desconocidas ni proporcionar por internet datos como como su nombre completo, su número de teléfono, su domicilio o sus fotografías. Es necesario que comprendan que compartir información personal puede ponerlos en riesgo a ellos y a sus familias.
Para complementar este punto, la guía para padres muestra los ajustes de configuración que se pueden realizar en Instagram para mantener la cuenta privada, para eliminar y bloquear a personas no deseadas, elegir quién puede comentar o si se prefiere desactivar los comentarios, quiénes pueden enviar mensajes, entre otras opciones que ayudan a que niños y adolescentes naveguen de forma más segura y libre de acoso.
Los padres deben dar a sus hijos la confianza de acercarse a ellos cuando alguien los moleste, acose, amemace o intimide. Lejos de sermonear o regañar, es necesario crear un vínculo de confianza con ellos, para que en vez de ocultar las cosas o tratar de solucionarlas por sí mismos vean en sus padres el apoyo y la guía que necesitan en los momentos complicados.
Hazle saber a tus hijos que si alguien les hace comentarios desagradables, si se ven envueltos en situaciones de acoso, si alguien les lanza amenazas o busca chantajearlos, lo primero que deben hacer es recurrir a ti para que juntos tomen las medidas pertinentes y recurran a las autoridades de ser necesario.
Además, enséñales a actuar ante el acoso o el bullying que va dirigido a ellos o a otras personas. Diles que si ven una cuenta, foto, video, comentario, mensaje o historia en Instagram que tenga por objeto intimidar o acosar a alguien, pueden denunciarlo dentro de la aplicación al tocar los tres puntos (…) que se encuentran en la esquina superior derecha de la publicación o el perfil y elegir la opción “Denunciar”. Pueden tener la tranquilidad de que las denuncias son totalmente anónimas.
Habla con tus hijos sobre cómo ser un buen ciudadano digital y, sobre todo, busca ser su mejor ejemplo. Háblales sobre la importancia de construir una experiencia en internet basada en el respeto hacia ellos mismos y hacia las demás personas. Es muy importante que sepan que tienen derecho a la libertad de expresión, pero que siempre es muy importante mantener una actitud positiva y ser amable con otros usuarios.
Es importante también cuidar el tiempo que tus hijos pasan en las redes sociales para que éstas no interfieran en sus actividades escolares, en lo que hacen con su tiempo libre ni en la relación con su familia y amigos.
Decirles o exigirles que dejen el celular o la tableta no te servirá si no les proporcionas otras opciones, e incluso si no los acompañas. Procura, sobre todo, pasar tiempo de calidad con tus hijos, de manera que puedan interactuar y conversar contigo.
Según su edad, acuerden juntos la cantidad de tiempo al día que pueden estar conectados, así como otras actividades que puedan realizar para apoyar con las labores en casa o bien, por ejemplo, con sus tareas escolares.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda que antes de los 2 años de edad los niños no tengan acceso a las pantallas. Entre los 2 y los 5 años pueden utilizar los dispositivos como máximo 1 hora al día, acompañados por una persona adulta.
Es probable que entre los 8 y 12 años comiencen a tener inquietud por las redes sociales, pero es importante considerar que estas aplicaciones establecen la edad legal para abrir una cuenta entre los 13 y los 14 años de edad. Háblales sobre la importancia de esperar un poco y de que conozcan las plataformas, que sepan sus ventajas, y resalta el valor de la autorregulación.
Los adolescentes son uno de los grupos más activos en redes sociales. Las plataformas como Instagram, Facebook, Twitter, TikTok, entre otras, exigen que sus usuarios sean personas mayores de 13 o 14 años.
Así que en vez de prohibirles o tratar de controlar y observar todo lo que hacen en esos espacios, es importante que respetes su privacidad y, más que alguien que restringe o censura, seas su guía y puedas acompañarlos en la creación de la cuenta para que juntos configuren los controles de seguridad específicos, pensados para ellos.
Háblales sobre cómo lograr una buena experiencia digital. Recuérdales que en esta etapa es muy importante que acepten como amigos en sus redes sociales únicamente a aquellas personas que conozcan en la vida real, sean amistades o familiares. Oriéntalos sobre las medidas de seguridad y cómo reportar un problema. Dales la confianza para que, en caso de que ocurra alguna situación incómoda, puedan compartirla contigo.
En esta edad es relevante recordarles que la vida digital es una extensión de la vida real y que todo aquello que compartan puede volverse público, más allá de las personas con quienes se compartió inicialmente el contenido. Pregúntales cuáles son sus aplicaciones favoritas, descárgalas y pruébalas en familia.
Toma en cuenta que a esta edad necesitan reforzar su privacidad y es probable que no quieran que los sigas en redes sociales. Por ello, es mejor generar un ambiente de confianza en todo momento, y no convertirte en una incomodidad en su vida digital sino en una madre o padre con quien puedan compartir sus intereses y, si es necesario, situaciones que puedan ser incómodas.
Procura conversar diariamente con tus hijos y muestra interés en lo que les importa, les gusta, preocupa, entusiasma o asusta; pregúntales continuamente cómo se sienten y muéstrate empático y comprensivo ante sus emociones y sentimientos, no los minimices ni los anules. Hazles saber que no están solos. Demuéstrales que te interesa lo que sienten y lo que piensan.
Puedes iniciar una conversación al preguntar: ¿Cómo estás? ¿Cómo ha estado tu día? ¿Cómo te sientes? ¿Has hablado con alguien sobre esto que te afecta?
Si identificas que tus hijos necesitan ayuda puedes comunicarte al Consejo Ciudadano al 55-5533-5533 (llamada telefónica o mensaje por WhatsApp), que brinda atención las 24 horas del día los 7 días de la semana y proporciona orientación psicológica y jurídica.
Foto de portada: Freepik