El taoísmo, considerado la religión original de China, tiene una actitud frente a la sexualidad sumamente avanzada, en la cual el sexo es considerado como algo que conduce a la plenitud y a la realización. Esta noción fue entendida quizás 2 mil años antes (o más) de cuando en Occidente notamos esto. En un texto clásico llamado Su Nu King o Clásico de la Virgen, recientemente publicado en español, se encuentran algunas pistas de la sexualidad taoísta.  

Aunque el texto fue publicado hace mil 500 años (si bien se cree que es mucho más viejo), ya en esa época y en casi todo el mundo había un cierto machismo o un patriarcado y eso también existe en este libro, o al menos se explica que para lograr el equilibrio de la energía es necesaria una retroalimentación, de tal forma que la mujer alcance el clímax. Pero aquí yace lo esencial de la sexualidad taoísta y de la llamada alquimia interna o neidan: la mujer debe llegar al orgasmo, pero el hombre debe retener el semen. El hombre se beneficia del yang femenino pero debe mantener su esencia vital, que es parte de la energía celeste original. El énfasis es enorme en mantener su esperma.

El Su Nu King ofrece tres maneras de evitar la eyaculación:

-La primera es la más conocida y consiste simplemente en retirar el pene --el llamado "tallo de jade"-- aún erecto antes de eyacular. Aunque esto pueda ser insatisfactorio para una sexualidad orgasmocéntrica, en la práctica se revela como una forma de conseguir un placer y un bienestar más duraderos.

-La segunda consiste en bloquear la zona del perineo (entre el escroto y el ano, el músculo que se utiliza para detener la orina), con el fin de retener el semen e incluso reabsorberlo. Al reabsorberlo se convierte en una especie de elixir.

-La tercera es realizar una respiración alquímica que recircula la energía que desciende hacia arriba. Esto es similar a la llamada "respiración de la órbita celeste" y es necesaria la instrucción de un maestro calificado.

En el caso de las mujeres, el taoísmo enfoca sus instrucciones alquímicas y energéticas en la restricción del flujo menstrual.

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