Demisexual es un término que se ha popularizado recientemente y se refiere a alguien que sólo experimenta atracción sexual cuando ha desarrollado una conexión emocional cercana con la otra persona.
¿Te sientes identificado con esto o tienes o has tenido una pareja que concuerda con esta definición? Si no estás seguro, piensa un poco en las relaciones que has tenido. ¿La atracción sexual se dio de inmediato o te tomó tiempo llegar a ella? ¿Has tenido relaciones sexuales con alguien a quien acabas de conocer, sin importar que no vuelvan a verse?
Las siguientes son algunas de las señales de que una persona es demisexual, y saberlo puede ayudar a tener una mejor comprensión y empatía en las parejas, para no sentirte forzado ni forzar a la otra persona a hacer cosas para las que no están emocionalmente listos.
Les toma un tiempo desarrollar atracción sexual. Los demisexuales generalmente se toman su tiempo para desarrollar relaciones y pueden no ver a una persona como atractiva o sexualmente excitante hasta después de semanas o meses de conocerlos, es decir, hasta que surge un vínculo emocional y se involucran sentimientos. En este sentido, estas personas no se sentirían cómodas de tener relaciones sexuales con personas a las que recién conocen.
No suelen tener crush con personas famosas. Si no experimentas ni siquiera una leve atracción o excitación cuando ves películas o fotos de celebridades que en general se consideran sexualmente atractivas, puedes ser demisexual. Los demisexuales responden menos a las señales de excitación visual y, por lo general, sólo identifican a una persona como atractiva cuando tienen más de una imagen en la que basar esa atracción, es decir, cuando han convivido con ella y conocen su personalidad y carácter además de la forma en que lucen.
Probablemente no estén interesados en encuentros casuales o aventuras de una noche.
Alguien que se identifica como demisexual puede sentirse desconectado o completamente desinteresado en las aventuras de una noche o cualquier práctica que implique involucrarse íntimamente con personas que aún no conocen y con quienes, por lo tanto, no hay vínculo afectivo alguno.
Prefieren las actividades de citas íntimas. Para un demisexual, la mejor forma de interactuar con alguien al inicio de la relación es mediante las actividades que fomenten el conocer a esa persona a un nivel mucho más profundo. Por ejemplo, ir a ver una película puede funcionar siempre que haya una buena conversación y una exploración de cómo la película les hizo pensar y sentir sobre un tema en particular. A medida que las emociones y los vínculos surgen en el contexto de la relación, la atracción sexual puede comenzar a brotar.
No tienen un "tipo" de persona que les resulte atractivo. Si bien la mayoría de las personas podrán describir de inmediato las características físicas de su pareja ideal (en estatura, complexión, color de piel y ojos, vestimenta, etcétera), este no siempre es el caso de alguien que se identifica como demisexual. Es posible alguien demisexual se sienta atraído por una variedad de personas diferentes en cuanto a su apariencia y descubra que ésta es secundaria a su personalidad, carácter y actitud.
Ya quedó claro que los demisexuales requieren una conexión emocional, sin embargo, eso no necesariamente significa que tendrán relaciones sexuales sólo hasta que estén "enamoradas" o hasta llegar al matrimonio.
Muchas veces sólo basta con sentir afecto por el otro o con tener una conexión surgida de compartir cosas en común; el nivel de conexión necesario es algo que varía de persona a persona y no tiene que ver con reservarse hasta el matrimonio, pues los demisexuales pueden explorar su sexualidad y tener diversas parejas a lo largo de su vida, al establecer vínculos emocionales de distintas intensidades.
Cuando se trata de placer sexual, el tiempo que la persona demisexual pase conectando consigo misma y con su pareja, y mientras mejor descubra sus sentimientos en torno al sexo, mejor podrá disfrutar de su sexualidad y comunicar abiertamente sus necesidades a su pareja. Esto también es útil para aprender a expresar lo que no quieren o no les gusta en la intimidad.
Algo muy importante es que, si tu experiencia en el sexo coincide con la definición de demisexual y requieres una conexión emocional para dar el paso a tener relaciones con alguien, nunca debes sentirte obligado o presionado para participar en una experiencia sexual con la que no te sientas cómodo; debes establecer límites y comunicárselos a tu pareja.
De igual manera, si tu pareja es demisexual y tú no, debes mostrarte empático y comprensivo, evitar presionarla y ayudarla a que te conozca mejor y se involucre, para que poco a poco lleguen al momento de disfrutar del sexo, en una experiencia agradable y natural para ambos.
Mientras tanto, puede ser útil encontrar otras formas de explorar la intimidad juntos, como las diferentes muestras de afecto físicas que no involucran la genitalidad, como los abrazos de todo tipo, el entrelazado de los dedos y las manos, los besos tiernos y apasionados, las caricias en diferentes partes del cuerpo que sean cómodas para ambos, jugar con el cabello del otro, etcétera.
Tómense su tiempo y exploren lo que les parezca más adecuado; lo importante es que ambos disfruten y se sientan cómodos con ello.
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