Quizás pienses que tu vida sexual y tus rutinas de belleza poco o nada tienen que ver, sin embargo, en realidad, las dos van de la mano. ¿Por qué? Porque la práctica de la actividad sexual tiene un impacto positivo en la belleza de la piel y el cabello, además de que tu humor mejora y eso hace que también luzcas feliz y radiante.

El aumento de la hormona estrógeno a través del orgasmo, así como la actividad física involucrada en el sexo, pueden promover una piel y un cabello saludables, así como un envejecimiento más saludable en general. Los siguientes son algunos de los beneficios del sexo para la belleza.

Vitalidad de la piel y el cabello

Los estudios han demostrado que las mujeres que son sexualmente activas (incluidas quienes practican la masturbación) suelen tener niveles más altos de estrógeno, ya que los niveles hormonales aumentan durante el orgasmo. 

El estrógeno es clave para el funcionamiento normal de la piel, los vasos sanguíneos, los folículos pilosos, las glándulas sebáceas y los melanocitos (células productoras de pigmentos). 

Esta hormona promueve la salud de la piel y el cabello, y aumenta la vitalidad de ambos. También juega un papel importante en la función normal de la barrera de la piel, pues ayuda a mantener su hidratación, mantiene bajo control la producción de glándulas sebáceas, reduce la inflamación, aumenta sus defensas microbianas, promueve la cicatrización de heridas y amortigua los efectos dañinos de las exposiciones ambientales como la radiación ultravioleta. 

El estrógeno también ayuda a mantener el cabello en la fase de crecimiento (anágena). En este sentido, algunas investigaciones han demostrado que las mujeres embarazadas que tienen niveles elevados de estrógeno tienen un cabello más grueso y abundante.

Piel rejuvenecida, flexible y radiante

Mantener una vida sexual activa te puede ayudar a sentirte joven de espíritu. Y la producción de estrógeno también promoverá el envejecimiento saludable de la piel, ya que su presencia aumenta la producción de colágeno, el grosor de la piel y la producción de ácido hialurónico, lo cual da a la piel una apariencia joven y flexible.

Además, los orgasmos liberan oxitocina, que reduce los niveles de estrés. Menos cortisol conduce a una menor descomposición del colágeno y elastina, lo que lleva a tener menos arrugas. 

En un estudio hecho con más de 3 mil personas se encontró que aquellos que tenían relaciones sexuales tres veces por semana parecían de 7 a 12 años más jóvenes que su edad real.

Así que, antes de pensar en usar botox, ¡practica más la actividad sexual! Recuerda que no sólo puedes hacerlo con una pareja, ya que también los orgasmos que se alcanzan a través de la masturbación tienen estos efectos y beneficios. 

Por otro lado, dado que el sexo es una forma de ejercicio físico, su práctica estimula la liberación de óxido nítrico, que aumenta el flujo sanguíneo y el oxígeno en todo el cuerpo. Esto es lo que conduce a ese resplandor después del sexo; así que, con el cutis radiante y  las mejillas enrojecidas naturalmente, ¿quién necesita maquillaje? 

Ayuda a reducir y aliviar el acné

Las investigaciones han demostrado que las personas activas sexualmente tienen niveles más bajos de estrés. Cuando las personas están estresadas, las reacciones del cortisol en el organismo provocan un aumento de la producción y el crecimiento de las glándulas sebáceas, así como la inflamación, lo cual contribuye a la aparición del acné. 

Dado que el estrés afecta la síntesis y reparación celular, al reducir el estrés, el sexo regular podría incluso promover la cicatrización de heridas, incluidas las lesiones del acné. ¡Adiós a las marcas y manchas oscuras! 

Ayuda a equilibrar los cambios ocurridos durante la menopausia

Dado que los niveles de estrógeno disminuyen naturalmente durante la menopausia, tener orgasmos puede aumentar su producción, para así mantener a raya los síntomas y efectos de la misma.

Sin el estrógeno para ayudar a producir ácido hialurónico y colágeno, la piel pierde su firmeza y comienza a ceder; aparecen líneas finas, arrugas y papada; y los poros y la pigmentación se vuelven más prominentes. 

De hecho, los estudios muestran que la piel de las mujeres pierde aproximadamente el 30% de su colágeno durante los primeros 5 años de la menopausia y aproximadamente el 2% de su colágeno cada año, durante los próximos 20 años.

Este adelgazamiento de la piel no sólo ocurre externamente, sino también en la vagina, lo que puede provocar dolor durante las relaciones sexuales. Practicar sexo (en pareja o en soliario) con más frecuencia, puede promover la producción de estrógeno y así mejorar la elasticidad en la vagina, por lo que la tensión y el dolor pueden reducirse. Además, tener relaciones sexuales con regularidad puede incluso retrasar la menopausia.

Así que ya lo sabes, además de exfoliantes, cremas, champús y acondicionadores, empieza a agregar algunas sesiones de sexo y/o masturbación a tu rutina de belleza. 

Foto de portada: Freepik