La energía sexual, como cualquier otra energía, mueve a las personas desde su interior y debe usarse de manera responsable. Las personas llevan una carga importante de energía a donde vayan, dejan huella, repercuten en su entorno y en quienes están a su alrededor, por eso no es una sorpresa que tu energía sexual también se irradie a los demás y viceversa.
¿Alguna vez lo habías pensado? El orgasmo tiene una finalidad más allá del placer, y ésa es liberar la energía sexual contenida, porque así como hay energía sexual que fluye, hay energía sexual que se encuentra bloqueada. Si buscas tener una nueva pareja, debes prepararte para ello, con la limpieza necesaria para ser una mejor versión de quien eres y de lo que quieres proyectar para los demás, incluso sexualmente.
Hay energía sexual limpia y energía sexual sucia, pero no se trata de una categorización moral, a lo que se refiere es a energía negativa o cargada de negatividad. Cuando compartes tu energía sexual con alguien también le compartes miedos, malos hábitos y conductas tóxicas. Existen personas mucho más abiertas o receptivas que otras, a las que se afecta negativamente de manera más profunda.
A través de las relaciones sexuales se comparte mucha más información de la que imaginas, y ésta puede quedarse en el otro por mucho tiempo, por lo que es necesario desbloquearla y eliminarla de vez en cuando. Estas son algunas formas en las que puedes hacerlo:
Este ejercicio brinda múltiples beneficios. El poder de la mente sobre el cuerpo es innegable, y es por ello que existen ejercicios de meditación enfocados en la limpieza y liberación de la energía sexual. Hay meditaciones de limpiar cada chakra, para regresar al otro lo que le pertenece y conservar lo que es tuyo.
Te compartimos una manera sencilla de hacerlo. Primero haz un recuento de las parejas sexuales que has tenido, pronuncia su nombre en voz alta y mientras lo haces realiza un nudo en un hilo rojo y repite la frase "Nada de ti en mí, nada de mí en ti. Gracias. Paz". Debes repetir la frase cada vez que hagas un nudo, cada que mencionas un nombre. Al terminar, enciende la vela y quema el hilo. Ofrece un pensamiento positivo para esas personas. Permanece en meditación unos cuantos minutos. Al terminar te sentirás mucho más ligero y en paz con tu pasado.
Llorar tiene un efecto purificador, que seguramente has experimentado después de hacerlo. Muchas veces, lo que le sigue al llanto es una sonrisa, porque esa opresión en el pecho apaga la felicidad y la tranquilidad. En numerosas ocasiones, tienes tanta energía negativa contenida que la única forma de sacarla es con las lágrimas, hasta quedar en paz.
Las mujeres taoístas solían practicar con un huevo de jade, que introducían en la vagina para realizar ejercicios de contracciones con los músculos vaginales, lo que mejoraba su salud, no sólo la sexual. El canal vaginal está lleno de terminaciones nerviosas y de puntos de reflexología, y con el masaje se estimulan diferentes órganos del cuerpo que lo sanan y vigorizan. Para limpiar la energía sexual se recomienda huevo de obsidiana, que se utiliza para sanar las memorias del aparato genital femenino. La obsidiana ayuda a emprender el "viaje de regreso a casa", a la tierra, al cuerpo. Trabaja a nivel mental, físico, emocional, energético y espiritual.
El huevo también estimula y encauza la energía sexual ya que activa la energía de la serpiente Kundalini, es decir, el poder de la energía sexual. Ésta nutre todos los chakras y amplía tanto la intuición como la conciencia. La kundalini es para muchos un portal hacia la elevación de la consciencia. Nace del primer chakra localizado en la base de la columna vertebral y al despertarla, ésta sube como una serpiente por los demás chakras y genera cambios y evolución espiritual.
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Practica esta meditación para equilibrar tus centros lunares. Además de tonificar los ovarios, tu aura se limpiará de la energía de tus compañeros sexuales. Bocabajo, coloca tus piernas juntas y estiradas, con los brazos a los lados del cuerpo y la palma de las manos hacia arriba. Apoya la barbilla en el suelo, con el pubis presionado en el piso. Los ojos van cerrados, mientras respiras con suavidad. Repite el mantra "Sa Ta Na Ma" en tu mente. Por cada sílaba, toca el dedo pulgar con el dedo índice (Sa), medio (Ta), anular (Na) y el meñique (Ma). Hazlo por 12 minutos y ofrécelo a tu intención de purificar tu energía sexual.
Puedes utilizar música con este mantra que te apoye durante la meditación.
Las vaporizaciones para las mujeres, con agua caliente y flores medicinales, es otra buena opción. Sólo necesitas un pequeño recipiente que soporte la temperatura del agua caliente. Una vez preparada la mezcla que compartiremos a continuación, colócala justo debajo de la vagina. Remueve tu ropa interior y utiliza una falda larga para concentrar el calor. Siéntate en una postura cómoda. La más fácil es llevar rodillas al piso y sentarte sobre los talones. Separa las rodillas y coloca el recipiente debajo de la vagina.
En el caso de los hombres se puede hacer un baño de tina, que también funciona bien para ellas. Para hacerlo, necesitas preparar un té con árnica (desinflama, te ayuda a volver a ti), manzanilla (tranquiliza, apapacha), romero (antibiótico natural, sana el interior), Santa María (calma los dolores físicos y emocionales), caléndula (repara tejidos, cura heridas) y albahaca (desinflama y sana el alma).
Lleva a ebullición esta mezcla con suficiente agua. Mientras, prepara la tina de baño con agua caliente y mezcla el agua con el té. Apaga el celular, prende unas velas y unos inciensos, y disfruta un buen rato para ti. En ese momento, busca claridad para cerrar el ciclo que termina y dar espacio para lo que viene. También funciona hacerlo a jicarazos, si te falta la tina. La intención es limpiar o purificar los vínculos sexuales con parejas del pasado.
En el momento de dar el paso a una nueva relación, el libro La alquimia de las relaciones amorosas, de Joseph Michael Levry, te guiará por el camino indicado. El autor revela principios espirituales que te serán útiles para construir, consolidar y mantener una relación amorosa y saludable.