Los alimentos funcionales son aquellos que, además de sus cualidades nutricias establecidas, aportan una función especial en nuestra salud al consumirse.
Conoce a continuación algunos alimentos funcionales, el ingrediente que da beneficio a la salud de cada uno y los beneficios de ellos en tu cuerpo.
Soya y legumbres
La soya y las legumbres son un alimento funcional cuyo ingrediente benéfico son las isoflavonas (genisteína y daidzeína). Su consumo impide la reproducción de células cancerígenas, interviene en el metabolismo de los estrógenos y actúa como antioxidante.
Pescado azul, chía y aceites de semillas
Al consumir pescado azul, chía y aceites de semilla como el aceite de oliva, se reduce el riesgo de sufrir ciertas enfermedades cardiovasculares, se previene la formación de coágulos de sangre y se combaten las reacciones inflamatorias. Esto se debe a su aportación de ácidos grasos, omega 3 y omega 6. La chía, además, es una fuente de proteína que funge como antioxidante y previene enfermedades del corazón, diabetes y desórdenes del sistema nervioso.
Yoghurt
El yoghurt es un alimento funcional que ayuda a equilibrar la microbiota y mejorar la salud digestiva. Al ser un lácteo también se asocia a un menor riesgo de desarrollar síndrome metabólico, diabetes mellitus tipo 2, hipertensión o enfermedades cardiovasculares. Por otro lado, el calcio del yoghurt favorece el control del peso y su contenido de proteína el mantenimiento de la masa muscular.