Bajar de peso y mantenerlo para cuidar tu salud no tiene que ser un desafío. Para muchos representa un propósito que implica un gran esfuerzo; sin embargo, este camino no debería ser un problema. La clave está en aprender a alimentarse adecuadamente y cambiar hábitos que muchas veces son los culpables de no conservar un peso saludable. Estos 10 consejos te ayudarán a cambiar la perspectiva sobre mantener un peso adecuado:

Visita a un especialista

Un profesional de la salud guiará tu forma de alimentarte de acuerdo con tus necesidades, gustos, ingresos, e incluso te orientará sobre la disponibilidad de alimentos que existan en el lugar donde te encuentres. El especialista logrará que exista armonía entre los macronutrimentos (carbohidratos, proteínas y grasas) que comes diariamente, para garantizar una alimentación saludable.

Sustituye bebidas azucaradas

Evita todas las bebidas azucaradas como refrescos, jugos embotellados, sobres para preparar agua de sabor, sueros rehidratantes e incluso jugos de frutas naturales, ya que contienen muchas calorías en forma de azúcar que tu cuerpo absorbe de manera inmediata.

Para saciar el antojo puedes elegir las versiones “light” o “sin azúcar” de algunos refrescos o jugos. Sin embargo, no olvides que el agua simple siempre será la mejor forma de hidratarte. Puedes aromatizarla y saborizarla con rebanadas de frutas y algunas hierbas aromáticas. También puedes elegir tés.

Recuerda que debes beber por lo menos 2 litros de agua al día para mantener tu cuerpo hidratado, cuidar tu peso y estar saludable.

Mide tus porciones

Determinar la porción de alimentos que cada uno debe comer resulta un poco difícil, pero con este cambio puedes notar grandes resultados. Organiza el plato de tus alimentos de la siguiente forma:

• Asegúrate de que la mitad de tu plato tenga sólo verduras crudas o cocinadas al vapor.
• Agrega una porción de pollo, res o pescado del tamaño de la palma de tu mano.
• Incluye una porción pequeña de leguminosas y otra también pequeña de cereales (arroz o una tortilla de maíz).
• Acompaña tu comida con una porción de fruta como postre.

Cambia los métodos de cocción

La forma en la que preparas tus alimentos determina qué tan saludable puede ser el platillo: los fritos, capeados y empanizados suman demasiadas calorías debido a la cantidad de grasa que es absorbida durante la cocción. En su lugar puedes optar por cocinar al vapor, saltear, asar, hornear, estofar, rostizar o al preparar al carbón. Descubrirás lo delicioso que puedes cocinar sin añadir calorías extra.

Compra lo necesario

Evita ir al supermercado con hambre, así podrás enfocarte en la lista de alimentos saludables que vas a comprar. Tener tentaciones fuera de tu alcance ayuda mucho. Asegúrate de comprar lo que realmente necesitas  (seguro no será comida chatarra, ni dulces). De esta manera, tu refrigerador y alacena no acumularán comida que no te nutre y te aleja de tu objetivo saludable. 

Colaciones saludables

Las colaciones son pequeñas porciones de alimento que puedes comer entre las comidas principales (desayuno-comida y comida-cena) y te ayudan a sentir saciedad y no llegar con demasiada hambre a tu próxima comida. La elección más recomendable para incluir como colación en la alimentación son las verduras. Por ejemplo, zanahoria, jícama o pepino, que puedes acompañar con limón, sal (en poca cantidad) y chile al gusto. También puedes optar por gelatinas de agua sin azúcar, la porción indicada de tu fruta favorita o un par de tazas de palomitas de maíz sin aceite ni mantequilla.

Disfruta tus comidas sin prisa

La hora de la comida es sagrada y lo más recomendable es que le dediques un tiempo específico. Procura no comer con ansiedad o de prisa y trata de masticar cada bocado varias veces. También ayuda mucho comer sin distracciones como la televisión o el teléfono móvil. Dedica este tiempo a disfrutar tus alimentos y saborear cada bocado.

Haz ejercicio

Realizar ejercicio durante al menos 30 minutos cada día te ayudará a mantener tu peso en óptimo estado, evitar enfermedades, aumentar tu energía e incluso mejorar tu estado de ánimo y autoestima.

Revisa tu estado de salud

Haz visitas periódicas con tu médico familiar y solicita chequeos regulares que te permitan conocer tu estado de salud. El médico te brindará un diagnóstico oportuno y concentrará sus esfuerzos en la prevención, con programas de alimentación adecuada y actividad física regular, para atender cualquier problema relacionado con el sobrepeso y la obesidad.

Comparte con los demás

Las cosas buenas son mejores si se comparten. Informa sobre los beneficios de mantener un peso adecuado a tus amigos y familiares, compartan ideas para preparar platillos deliciosos que sean saludables y hagan en equipo esos cambios de hábitos; será mucho más fácil si todos participan.

Con información de Merck

Foto de portada: Pexels