Las mentes de los niños son sumamente poderosas, pero también sumamente frágiles: los pequeños son los más vulnerables emocionalmente cuando ocurre una tragedia. Es muy importante prestarles atención psicológica y apoyo emocional después de que han presenciado un evento traumático, para que sean capaces de procesarlo y superarlo adecuadamente. Es muy importante que no intentes ocultarles lo sucedido o mentirles respecto de lo que pasó, pero que tampoco los sobreexpongas a imágenes o narraciones que puedan afectarlos y atemorizarlos.
Te dejamos 10 tips de expertos para lidiar con el estrés postraumático infantil después de que han presenciado una tragedia:
- Habla con ellos de lo sucedido, pregúntales si tienen dudas o qué están pensando. Los niños necesitan ser escuchados.
- Hazlos sentirse seguros, no les transmitas miedo o angustia. Si no puedes controlar tu ansiedad, te recomendamos estos mantras.
- Permite que expresen su angustia a través de la creación: dales materiales para dibujar, pintar o modelar.
- Hazles saber que tienes un plan de acción. Si no tienes uno, elabóralo junto con ellos; eso los tranquilizará.
- Canten. El canto y la música han demostrado ser terapéuticos para los niños y los ayudan a relajarse y calmarse.
- Si están muy asustados y no desean separarse de ti ni un segundo, no los obligues, poco a poco irán recuperando independencia.
- No seas severo. Trata de no regañarlos demasiado; es una situación tensa en la que quizá te sientas exasperado con facilidad. Relájate.
- Encuentra el lugar de tu casa donde tus hijos se sientan más seguros, y permanezcan ahí juntos hasta que se calmen.
- No les ofrezcas comida o dulces para tranquilizarlos o en el futuro asociarán la comida con contención emocional.
- Permíteles dormir contigo. No será permanente, pero es muy probable que lo necesiten durante unos días.
Lo más importante es que tú mantengas la calma, para que puedas ayudar a las personas a tu alrededor. En este video encontrarás consejos para manejar crisis de ansiedad de personas adultas.