Para realmente encontrar el bienestar personal y lograr sentirnos en plenitud, el primer aspecto que debemos trabajar es la relación que tenemos con nosotros mismos. Está claro que no importa cuánto dediquemos a los demás o al mundo material, si no estamos en equilibrio desde el centro de nuestra persona, no habrá estímulo que pueda satisfacernos por completo.

Por eso creemos que es fundamental tratarse con respeto a uno mismo, y aquí te damos ocho tips para conseguirlo:

1. Conócete

El primer paso para respetarte es conocerte. Es decir, definir qué cosas te gustan, con qué actitudes estás de acuerdo, qué esperas para tu vida en el futuro, en qué te gustaría convertirte, etc. Así podrás respetar lo que te hace feliz.

2. Sé congruente

Una vez que logras definir lo que quieres para ti, practica la congruencia en tus actos. Busca que tus decisiones se aproximen a lo que quieres para tu vida y respeta lo que te gusta y lo que no.

3. Sé compasivo

Perdona las cosas que te molestan de ti mismo y aprende a quererte como eres.

4. Potencia tus fortalezas

Identifica las cosas que te gustan de ti y potencia tus capacidades. Cada quien tiene cualidades muy particulares que lo distinguen del resto; define las tuyas y vive al máximo tu potencial.

5. No te compares

Para respetarte a ti mismo, debes comprender tus propias necesidades y ritmos y no obligarte a ser como nadie más.

6. Ten gratitud

Reconoce todo lo que haces bien y ten gratitud por el estado de tu vida. Cuando reconocemos lo positivo, podemos poner en perspectiva la realidad y respetar mucho mejor nuestro presente.

7. Cuida tu cuerpo

Una alimentación saludable, hacer ejercicio, cuidar nuestra apariencia y todo lo relacionado con el cuidado de nuestro cuerpo nos ayuda a respetarnos y querernos.

8. No te abandones

Evita lastimarte mediante sustancias que te hagan daño o mediante pensamientos que te perjudiquen. Trata que todo a tu alrededor te haga sentir más pleno y feliz.

El respeto inicia con uno mismo. Cuando nos sentimos cómodos con nosotros y entendemos los motivos por los cuales debemos ser valorados, las personas a nuestro alrededor entran en sintonía y aprenden a respetarnos también.