Empieza el 2020 y, con el nuevo año, un sinfín de oportunidades. Este es un buen momento para observar qué haces y cómo lo haces, para identificar cómo puedes cambiar y si así puedes mejorar. 

Podrías pararte frente a 20 extraños y hablar sobre cualquier tema. Algunos odiarán lo que llevas puesto, otros lo amarán. Algunos pensarán que no eres brillante y otros se interesarán con cada palabra que digas. Algunos te olvidarán pronto, mientras que otros te recordarán por años.

No tienes que preocuparte por la forma en la que te ven los demás o por lo que digan cuando su opinión no es importante ni constructiva para ti. Las opiniones de otras personas sobre ti no son asunto tuyo, no tienen nada que ver contigo, pero sí con ellos: su pasado, sus juicios, sus expectativas, sus gustos y sus disgustos.

Así que tú entrega lo mejor de ti en cada momento, pero no te detengas por sus opiniones, pues eso no tiene nada que ver contigo, no lo olvides.

Para dejar de darle importancia a lo que dicen los demás, puedes seguir las siguientes recomendaciones, cinco cambios de pensamiento que cambiarán tu vida:

1. Conoce tus valores

Conocer tus principales valores es como tener una linterna más brillante para atravesar el bosque. Una luz más opaca aún puede llevarte a donde necesites ir, pero hará más difícil e inseguro el camino.

Identifica esos valores y qué papel juegan en tu vida. Compasión, coraje, perseverancia, paz interior, autenticidad, confianza, etcétera. Será mucho más sencillo tenerlos presentes cuando detectes que te preocupa lo que piensen los demás.

2. Permanece en lo tuyo

Hay cosas que no puedes cambiar, cosas que pasan naturalmente como la muerte, el clima, la genética, etcétera. Del mismo modo, lo que piensen los demás tampoco es algo que tú puedas o debas controlar. 

Pero hay otro asunto que sí está en tus manos. Piensa que si te enoja que el conductor de adelante va lento o no arranca de inmediato cuando la luz cambia al verde, es asunto tuyo; si te molesta que tu compañero de trabajo llegue tarde, es asunto tuyo; si te preocupa lo que tu vecino piensa sobre ti, es asunto tuyo. Preocúpate por ti, por lo que piensas y por lo que haces para controlar tu vida.

3. Propiedad sobre tus sentimientos

Cuando cedes la propiedad de tus sentimientos a los demás, cedes el control sobre tus emociones. El hecho es que la única persona que puede herir tus sentimientos eres tú. Para cambiar cómo te hacen sentir las acciones de otras personas, sólo necesitas cambiar tu pensamiento.

Este paso a veces requiere un poco de trabajo porque tus pensamientos generalmente son automáticos o incluso inconscientes, por lo que puede tomar un poco de tiempo descubrir qué pensamiento causa tu emoción. Pero una vez que lo hagas, desafíalo, cuestiónalo o acéptalo. Tus emociones te seguirán.

4. Lo haces lo mejor que puedes

¿Cuánto tiempo inviertes en castigarte porque crees que cometes errores? Empieza a pensar que todo lo que haces tiene una intención y un impacto positivo. Puede que no sea obvio, pero es así. Acepta que tu esfuerzo es importante y suficiente, que lo que haces es conforme a tus límites y capacidades. Eso no significa que dejes de esforzarte, porque puedes mejorar y crecer, sólo debes cambiar el enfoque de tu pensamiento.

5. Todos cometen errores

Es común que las personas no hablan sobre cómo se sienten, pero resulta que todos experimentan los mismos sentimientos y todos cometen errores. Incluso si vives en sintonía con tus valores, incluso si te dedicas a tus asuntos, incluso si haces tu mejor esfuerzo, sin duda cometerás errores.

Todos cometen errores y a veces es necesario porque así puedes aprender sobre tener compasión por ti mismo, lo cual será más fácil cuando entiendes que todos se han sentido así. Lo único que puedes hacer con tus errores es aprender de ellos. Una vez que aprendas la lección de esa experiencia, podrás seguir adelante.

Dejar de preocuparte por lo que piensan los demás cambiará tu vida.

Con información de Tiny Buddha