Los fracasos, los fracasos repetidos, son los indicadores en el camino hacia el logro. Se fracasa hacia el éxito.
(C. S. Lewis)
Comienza el año y todo mundo tiene mil metas y propósitos que cumplir. Pasan los días, algunas semanas y todo cambia de repente. Se te quitan las ganas de seguir, ya te da flojera y piensas “¿para qué?”. Esto no solamente ocurre cuando es inicio de año; en muchas ocasiones tú solo te pones el pie para no cumplir todo eso que soñaste. Deja de sabotearte, ponte las pilas y ejercita tu fuerza mental para lograr todo lo que quieres, hoy y siempre.
De acuerdo con la psicóloga Amy Morin, necesitas hacer lo siguiente:
Las conversaciones que tienes contigo mismo afectan cómo te sientes y cómo te comportas. Pero si eres como la mayoría de la gente, probablemente prestas muy poca atención a la forma en que te hablas a ti mismo. Después de todo, siempre estás contigo y con todas esas narrativas mentales. Por ello tienes que comenzar con eso, para ser consciente de cómo te tratas y así puedas ser amable y respetuoso contigo.
Insultarte te impedirá dar lo mejor de ti mismo. Cuando notes que no eres amable contigo, responde con palabras más compasivas. Háblate de la misma manera en que hablarías con un amigo de confianza y no sólo te sentirás mejor, pues diversos estudios han demostrado que también te desempeñarás mejor. Es momento de dejar de juzgarte para empezar a comprenderte mejor.
Cuando pienses en todas las cosas que podrían salir mal o en las razones por las que estás condenado a fracasar, argumenta lo contrario. Haz una lista de todas las maneras en que las cosas podrían salir bien o de todas las razones por las que podrías tener éxito. Esto puede ayudarte a ver que tus pensamientos negativos no son hechos, y puedes desarrollar una perspectiva más realista.
Cuando te falta motivación para seguir adelante, encontrarás muchas excusas para rendirte. La mejor manera de contrarrestar esas excusas es enlistar todas las razones lógicas por las que deberías continuar.
Claro, puedes tener todos los buenos hábitos del mundo. Pero si sigues con los hábitos dañinos que te hacen dar un paso hacia atrás, entonces no sirve de nada. Imagínate trabajas por mejorarte, pero sigues con resentimiento hacia el éxito de los demás.
Basta solamente con un hábito dañino, ya sea físico o mental, para que te mantengas estancado. Si quieres lograr cosas de forma inteligente, identifica todos esos hábitos que no te dejan ir hacia adelante.
A nadie le gusta sentirse mal, enojado, triste o lidiar con alguna emoción negativa. La buena noticia es que puedes soportar sentirte incómodo. Y tu insistencia en que debes evitar una emoción específica no es verdad. Permitirte sentirte un poco incómodo te recordará que, aunque no es agradable, es tolerable.