El brócoli es uno de esos alimentos amados por muchos y odiado por otros tantos. Pero más allá del gusto, debería ser parte de una dieta saludable porque aporta una gran cantidad de nutrientes.

Este vegetal es una excelente fuente de vitaminas K, C, B1, B6, A y E, además de cromo, ácido fólico, manganeso, potasio y cobre. Entre los minerales que contiene están el fósforo, el hierro y el potasio. Y además es rico en omega 3, proteína vegetal, calcio, zinc, hierro y selenio. Asimismo, posee fitonutrientes, antioxidantes y fibra.

Pero además de su completa composición nutrimental, recientemente los investigadores del Beth Israel Deaconess Medical Center (BIDMC) de la Facultad de Medicina de la Universidad de Harvard, encontraron una relación entre la disminución del riesgo de contraer cáncer y el consumo de brócoli y otras verduras crucíferas (la familia de plantas que también incluye coliflor, col, coles, coles de Bruselas y col rizada), pues éstas contienen una molécula que desactiva un gen que desempeña un papel importante en una variedad de cánceres comunes.

En el estudio realizado, un ingrediente encontrado en el brócoli suprimió el crecimiento tumoral en animales de laboratorio propensos a desarrollar cáncer. Esa sustancia, conocida como supresor tumoral, se encarga de frenar las células cancerígenas para que no se dividan demasiado rápido, lo cual retrasa el crecimiento de los tumores y la propagación del cáncer. 

Durante la investigación, los expertos reconocieron que una molécula pequeña, llamada formalmente indol-3-carbinol (I3C) y que está presente en el brócoli y otros vegetales de la misma familia, podría ser la clave para aminorar los efectos causantes de cáncer.

Sin embargo, ya que para obtener por completo ese efecto supresor tumoral sería necesario comer grandes cantidades de brócoli todos los días, los investigadores buscan otras formas de aprovechar este nuevo conocimiento. Aun así, no dejes de incluir brócoli en tu dieta, pues es un alimento muy nutritivo y te puede ayudar con la prevención del cáncer y otras enfermedades.

Por otro lado, expertos de +Brócoli recomiendan no tirar el tallo del brócoli, porque esta parte también es rica en nutrientes y sus componentes ayudan a reforzar el sistema inmunológico. Además, puede ayudar a los diabéticos a eliminar los daños causados en los vasos sanguíneos, y en el tronco se encuentra una sustancia llamada sulforafano, un antioxidante fitoquímico que tiene propiedades antinflamatorias. Así que lo ideal es consumir este vegetal completo. 

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Con información de Milenio y UNAM Global