Dicen que la forma en que te desenvuelves en el mundo tiene mucho que ver con cómo fuiste educado desde casa. Si desde la infancia todas las personas fueran educadas para tener conciencia del medioambiente, tal vez el mundo sería otra cosa. Pero nunca es tarde para llevar a cabo acciones que contribuyan con el bienestar del planeta.
Puedes comenzar con cosas pequeñas, no tienes que hacer grandes cambios de un día a otro. Lo importante es que te des cuenta de que esas pequeñas acciones pueden crear un cambio mayor si las haces de forma constante y con disciplina.
Crea una composta
Esta es una buena forma de utilizar cosas que estaban en tu refrigerador y que ya no sirven. Así eliminas deshechos pero los ocupas en otra cosa. Sin embargo, no todo sirve; los desechos orgánicos que sí se pueden utilizar para una composta son: sobras de frutas y verduras, granos de café, cascarones de huevo, restos de plantas (pétalos, ramas, hojas secas) y periódico picado.
Desconecta los electrónicos que no utilices
Evita el uso innecesario de la energía y desconecta todos los aparatos que gasten electricidad cuando no los usas, como el tostador, la cafetera, la secadora, etcétera.
Todo lo que se encuentra en un tomacorriente eléctrico es una fuente de alimentación principal, incluso cuando no está en uso. Al desconectar algunos dispositivos, contribuirás en gran medida al ahorro. Unos pocos dispositivos desconectados diariamente ayudan mucho a reducir tu consumo de electricidad.
Apoya la economía de tu localidad
Apoya a los agricultores locales e intenta comprar los alimentos más frescos que estén cultivados cerca de donde te encuentras. En la medida de lo posible, consume cosas del mercado más cercano en lugar de comprarlo todo en el supermercado.
Antes de comprar algo nuevo, revisa si realmente lo necesitas
Hay ocasiones en las que no te preguntas si de verdad necesitas ese nuevo mueble o no, o cualquier cosa del hogar. Inclusive, en ocasiones compras comida sin darte cuenta de que ya tienes suficiente. La próxima vez que quieras ir de compras para el hogar, mejor pregúntate dos veces si es realmente necesario. Y si necesitas algo, es mejor que hagas una lista concisa de cosas y optes siempre por las opciones más amigables con el medioambiente.
Planta un jardín
Cuida de tu cuerpo y alma mientras plantas un jardín, no importa si es solamente una pequeña planta o algunas flores y hierbas.
Además, si optas por tener un pequeño huerto en casa, cuando cultives tus propios alimentos reducirás la dependencia a los alimentos procesados y también tu huella de carbono.
El cultivo orgánico reduce los pesticidas y los productos químicos no deseados en los alimentos, en el suelo y en el aire, a la vez que evita la dependencia de los alimentos que se importan a muchos kilómetros de distancia.
Utiliza servilletas de tela
Puedes contribuir a la conservación de los bosques si optas por utilizar servilletas y toallas de tela cuando te sea posible. Si no, siempre busca que sean hechas de materiales 100% reciclables.
Quítate los zapatos al entrar a tu casa
Sí, quítate los zapatos en la puerta. Todos los días caminas por pisos sucios, césped, tierra y pavimentos. Tus zapatos no sólo recogen suciedad, sino también alérgenos y contaminantes. Imagínate toda la suciedad que metes a tu casa, proveniente de los zapatos y la ropa.
Con información de The Art of Simple