Los días en aislamiento han representado un reto importante para las parejas, especialmente en el ámbito sexual. Factores como el estrés, la ansiedad, la depresión, la incertidumbre y el temor al contagio han provocado una inestabilidad emocional que coloca la actividad sexual en segundo plano.
Leisure Sciences realizó una encuesta donde participaron mil 599 personas mayores de 18 años, la cual reveló que el 43.5% de los participantes experimentaron una disminución importante en su actividad sexual y que solamente un 13.6% han mejorado en este ámbito.
Tras casi 1 año de aislamiento y distanciamiento social, para muchas parejas el sexo se ha convertido en un tema casi inexistente, e incluso ha derivado en separaciones y divorcios.
Uno de los principales motivos es el agotamiento tanto físico como mental y emocional. Las jornadas de trabajo en casa se han extendido y el cansancio, en combinación con la rutina, el estrés, la ansiedad y la fatiga, se han vuelto un matapasiones recurrente para las parejas que viven juntas, mientras que en otros casos también se debe a que se encuentran separados en aislamiento.
Para algunos, la ansiedad y el deseo sexual son incompatibles y está comprobado que ambos utilizan como vía al sistema nervioso autónomo. Ahora que la ansiedad ha aumentado, la libido se ha visto afectada.
Otro factor importante que afecta el deseo sexual es la imagen corporal, y es que debido a que un gran número de personas ha subido de peso por la inactividad ocasionada por el confinamiento, tanto hombres como mujeres no se sienten cómodos con su físico, lo cual genera estrés al ser vistos desnudos por su pareja y perjudica tanto su deseo como su desempeño sexual.
El estrés no sólo tiene efectos emocionales y mentales sino también físicos, pues cuando se elevan los niveles de cortisol, se evita que los vasos sanguíneos se estrechen y en consecuencia los hombres no pueden alcanzar una erección, mientras que las mujeres no pueden llegar al orgasmo.
“La energía sexual necesita suficiente tensión, pero no demasiada. En estos meses en aislamiento todos hemos desarrollado creatividad en otros ámbitos como la cocina, la decoración o el cuidado de plantas; es el momento ideal para también ser creativos en la sexualidad”, explica Javier Sors, director de CRYOmx.
Reactiva tu placer físico. Este es un paso importante como individuo, el sexo o tener un orgasmo no es lo único que se relaciona con placer. Siente tu cuerpo, descúbrelo y olvídate de los tabúes alrededor del autoerotismo. Es momento de activar tu deseo sexual desde el autodescubrimiento.
Hablen de sus emociones. Cuando la comunicación fluye y las cosas se ponen sobre la mesa, es mucho más fácil entender al otro. Romper esta barrera es importante para dejar que el deseo aparezca y disfruten en pareja de una experiencia erótica libre de prejuicios, temores, tabúes y estrés; permítanse sentirse como la primera vez y redescubrirse juntos.
Crioterapia en pareja. Aunque no lo creas, el frío te hace entrar en calor y se vuelve toda una aventura el ingresar en una cabina completamente desnudo (a excepción de los pies y las manos) para exponer tu cuerpo durante 3 minutos a -180° y despertar la oxitocina, también conocida como “la hormona del amor” que, además, es responsable de que te enamores y tu deseo sexual aumente de manera natural.
“Experimentar en pareja terapias alternativas como la crioterapia disminuirá sus niveles de cortisol, se sentirán relajados y debido al placer de experimentar el frío intenso, habrán despertado su deseo más primitivo”, expresó Sors.
Rompan la rutina. Toda rutina termina por aburrir o cansar y el sexo no se escapa de esto. Aprovechen la tecnología y todo lo que hay en línea para divertirse y experimentar, es cuestión de darle vuelo a la imaginación y probar cosas nuevas: juegos eróticos, disfraces, juguetes sexuales e incluso comida, que en combinación les darán una experiencia enriquecedora y apetitosa en todos los sentidos.
Acudan a un sexólogo. Los especialistas son los mejores al momento de sanar y encontrar rupturas profundas en ciertos temas. La labor del especialista es ayudarte a abrir los ojos y reconocer lo que falla para solucionarlo; considerar una terapia cuando ya has intentado todo, es la mejor opción.
Es momento de hacer algo por la libido y disfrutar de tu pareja sin temores. Recuerda que el cerebro es el órgano sexual más poderoso, ¡Estimúlalo!
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